(Leo Jozef o Joseph Suenens; Ixelles, 1904-Bruselas, 1996) Prelado belga, procedente de una familia humilde, pudo continuar sus estudios eclesiásticos gracias a la protección de Cardenal Mercier, doctor en teología y licenciado en derecho canónico, fue ordenado sacerdote en 1927 y hasta 1940 enseñó en el Seminario de Mechelen.
Leo Joseph Suenens
Fue entonces vicerrector de la Universidad de Lovaina (1940-1945), arzobispo de Mechelen-Bruselas y primado de Bélgica en 1961 Sus primeros escritos sobre la Virgen María datan de esta etapa, así como sobre el apostolado laical entendido como deber y como vocación.
Nombrado cardenal en 1962, desempeñó un papel importante en el Concilio Vaticano II; La amistad y el buen entendimiento que tuvo con el Papa Juan XXIII le valió el nombramiento de miembro de la comisión preparatoria del Concilio.Cuando Juan XXIII murió durante la celebración, su sucesor, Pablo VI, lo nombró moderador.> Posteriormente, como miembro de la Comisión Pontificia para la revisión del derecho canónico y como presidente de la Conferencia Episcopal de Bélgica, protegió con su autoridad y sus libros el movimiento católico de renovación carismática, dimitiendo de sus cargos en 1980, debido a su Leo Jozef Suenens fue también un destacado defensor del movimiento ecuménico y, como tal, tuvo contactos frecuentes con líderes espirituales y teólogos de otras religiones.