La vida secreta de Albert Francis Brown, el hijo del infame Al Capone.
Albert Francis Brown, conocido por muchos como Sonny Capone, vivió una existencia marcada por la sombra de su padre, el famoso mafioso Al Capone.
El peso del legado criminal de Al Capone se cernía sobre él desde su nacimiento, obligándole a luchar por distanciarse de la infamia y construir una vida propia lejos de las actividades delictivas que rodeaban a su familia.
Al Capone murió hace mucho, mucho tiempo, afirmó America Amie Francis, esposa de Brown, tras su fallecimiento en 2004.
Su hijo no tenía nada que ver con él.Déjenlo descansar en paz.La petición de la viuda refleja el deseo del propio Brown por romper con las ataduras del pasado y ser recordado por su propia vida, no por la de su padre.
Nacido en Brooklyn en 1918, Albert Francis Capone enfrentó desde temprana edad las especulaciones sobre su paternidad.
Algunas versiones apuntan a que Al Capone, quien padecía sífilis antes del matrimonio, podría haber sido estéril.
Otros rumores incluso sugieren que Mae Josephine Coughlin, madre de Sonny, era estéril y que Albert pudo haber sido adoptado.
A pesar de estas dudas, Al Capone mostró un profundo amor por su hijo.Cuando Sonny sufrió una grave infección mastoidea que amenazó con dejarlo sordo, el mafioso no escatimó esfuerzos ni dinero para salvar la audición de su pequeño.
El tratamiento fue exitoso, pero Sonny quedó parcialmente sordo del oído izquierdo, una condición que lo acompañaría durante toda su vida.
A pesar del entorno familiar complejo, Al Capone intentó alejar a Sonny de sus actividades ilegales.
Sonny asistió a prestigiosas escuelas y estudió en la Universidad de Miami, buscando construir una vida diferente.
La sombra del apellido Capone siempre lo persiguió, dificultando su integración social y personal.
Tras la muerte de Al Capone en 1947, Sonny decidió intensificar su separación del legado familiar.
Desempeñó diversos trabajos modestos para ganarse la vida, alejado del mundo criminal que había marcado a su padre.
El peso del apellido seguía afectándole.En 1959, cuando la serie Los Intocables retrató a Al Capone en la televisión, Sonny y su madre demandaron a los productores por difamación.
Aunque la demanda llegó a la Corte Suprema, fue rechazada.
En 1965, tras un incidente de hurto que le llevó a ser arrestado, Sonny tomó la decisión definitiva de romper con su pasado.
Cambió oficialmente su nombre a Albert Francis Brown, buscando vivir una vida anónima y proteger a su familia del estigma asociado con el nombre Capone.
En Auburn Lake Trails, California, Brown encontró paz y tranquilidad.Vivía lejos del escrutinio público, casado tres veces y rodeado de hijos, nietos y bisnietos.
Los vecinos lo conocían como un hombre amable y sencillo, sin conexión aparente con la figura legendaria que había sido su padre.
Albert Francis Brown representa una historia fascinante sobre el poder de la elección personal.A pesar de haber nacido bajo la sombra del infame Al Capone, logró construir una vida propia, alejada del crimen y la violencia, dejando un legado propio digno de reconocimiento.