La startup Donut Lab ha revolucionado el panorama automotriz con un concepto innovador: motores integrados en las ruedas que desafían la arquitectura tradicional del vehículo.
Este sistema, bautizado como donut motor, combina baterías de alta densidad, electrónica de potencia y un motor eléctrico en un disco compacto que supera en eficiencia a los motores centrales y transmisiones convencionales.
La clave está en el diseño circular, explica el director técnico de Donut Lab, que distribuye el peso uniformemente, permitiendo aceleraciones suaves y optimizando la energía consumida.
Estos módulos autónomos ofrecen una potencia variable de 50 a 200 caballos por unidad, ofreciendo configuraciones personalizadas para diferentes tipos de vehículos.
Un coche urbano podría utilizar dos donuts, uno por eje, mientras que un deportivo podría integrar cuatro para maximizar su rendimiento.
La versatilidad del sistema se extiende al tipo de combustible.Si bien los donuts son inicialmente diseñados para funcionar con baterías eléctricas, también se pueden adaptar a celdas de combustible de hidrógeno líquido, abriendo nuevas posibilidades para vehículos más eficientes y con mayor autonomía.
Es una tecnología que podría revolucionar la movilidad, afirma el experto en energía renovable, Juan Pérez.
La combinación de donuts motores con hidrógeno líquido podría crear un híbrido altamente eficiente con una autonomía significativa.
Pero el impacto de esta innovación no se limita a la eficiencia energética.Al integrar todo el sistema de propulsión en la rueda, se elimina la necesidad de diferenciales, ejes de transmisión y complejos sistemas de refrigeración, lo que resulta en un ahorro considerable de peso: hasta 300 kg menos en un sedán medio.
Este aligeramiento del vehículo libera espacio para maleteros más grandes y habitáculos más amplios.
Los prototipos han demostrado un 40% más de espacio útil en comparación con los vehículos eléctricos tradicionales, destaca una portavoz de Donut Lab.
La tecnología no se limita al mundo automotriz. Ya se está probando en drones de carga, carretillas industriales e incluso en sillas de ruedas eléctricas, demostrando su versatilidad y adaptabilidad a diversos sectores.
Con planes para lanzar kits de conversión en 2026, Donut Lab busca democratizar esta tecnología, permitiendo a los propietarios de vehículos antiguos convertirlos fácilmente en eléctricos de alto rendimiento.
La visión de la empresa es clara: El futuro de la movilidad no solo será limpio, sino también redondo, modular y sorprendentemente sencillo, concluye la portavoz.